Tradicionalmente, los edificios multiresidenciales instalaban un contador general o central que proporcionaba la información del consumo del edificio completo. Esto daba lugar a un reparto injusto de los costos energéticos entre los residentes al no conocerse el consumo real de cada uno de ellos. La sub-medición representa una alternativa excelente de transferir la responsabilidad y los costos asociados al consumo de servicios públicos a procesos individuales.
En el caso de las instalaciones comerciales o las empresas de fabricación que cuentan con instalaciones amplias y sofisticadas, la gestión energética es fundamental, y la aplicación de buenas prácticas de gestión energética requiere disponer de información detallada sobre el consumo energético. Los ingenieros de las instalaciones tienen la necesidad de conocer dónde y cómo se utiliza la energía en sus propiedades.
La sub-medición eléctrica implica la instalación de contadores eléctricos en cada circuito de distribución para monitorear el uso individualizado de cada residente, apartamento en alquiler, oficina en alquiler, departamento de producción o unidad o equipo de producción específicos.
La sub-medición aporta una amplia variedad de ventajas. Además de permitir que el administrador energético pueda monitorear el consumo de energía de forma precisa y en tiempo real, el sistema de sub-medición puede registrar el uso energético real. Estos datos históricos permitirán que el usuario analice y compare el uso energético entre edificios o instalaciones similares durante un periodo de tiempo determinado, con el propósito de identificar áreas en las que se desperdicia energía con el objetivo de tomar mejores decisiones, basadas en datos, para optimizar el rendimiento energético de la instalación.
La sub-medición es un componente fundamental de las futuras mejoras operativas de la instalación en relación con la eficiencia energética, las mejoras en la conservación de la energía y las mejoras de la calidad ambiental.
Conocer el consumo energético es fundamental para reducir los costos energéticos crecientes y mejorar la eficiencia energética. La sub-medición permite monitorear el uso energético de cada unidad de producción: desde departamentos completos hasta unidades de equipo individuales. Con estos datos, puede conocer mejor su uso energético por unidad de equipo y realizar un análisis más sencillo del costo-beneficio a la hora de renovar los equipos existentes o adquirir nuevos equipos más eficientes. Asimismo, permite que el director financiero asigne la producción correcta por unidad.
Los inquilinos que viven en edificios residenciales y no residenciales suelen recibir facturas basadas en los metros cuadrados de espacio ocupado. La factura eléctrica del propietario contabiliza el gasto del edificio completo, y el gasto de cada residente se basa en el espacio que tiene alquilado. La facturación de los inquilinos se realiza con base en el consumo completo del resto de residentes y no con base en su propio consumo individual. La sub-medición para inquilinos permite facturar a cada uno de ellos por la cantidad de energía que han consumido realmente. Los inquilinos se verán más motivados a mejorar sus hábitos de consumo energético y a reducir el consumo general si son responsables de su propio uso. En futuros blogs, abordaremos cómo la sub-medición en edificios residenciales ha reducido la factura eléctrica general.
La sostenibilidad energética se ha convertido en una función empresarial fundamental para numerosas organizaciones. Microsoft, Facebook, Apple y muchas otras empresas tecnológicas se han comprometido con la energía 100% renovable para reducir la huella ecológica de sus plataformas.
Ha llegado el momento de que todos los propietarios y gerentes comiencen a reflexionar sobre cómo conseguir que su consumo energético sea transparente y cómo utilizar los datos obtenidos de un sistema de sub-medición acreditado para tomar decisiones informadas a fin de reducir los costos energéticos.